Un grupo representativo de mujeres integradas bajo la campaña
NO a los Biopolímeros se reunió con el director del Servicio Autónomo de Contraloría Sanitaria (
SACS), Divis Antúnez, a fin de
precisar medidas contra los distribuidores y las estéticas que aún se siguen lucrando con sustancias para agrandar los glúteos y otras partes del cuerpo, pese a la
prohibición de esta práctica, de acuerdo con una resolución emitida por el
Ministerio para la Salud, en
diciembre de 2011.
De acuerdo con una nota emitida por el ministerio, Antúnez reiteró
que hasta el mes de marzo se habían efectuado 1.350 inspecciones a establecimientos de todo el país, y que 70 de éstos fueron clausurados.
“Además,
hemos iniciado 39 procedimientos administrativos, estamos ejerciendo control y seguimiento sobre este tema, sobre este tipo de productos tan perjudicial para la salud”, aseguró.
Según el c
ontralor de Salud, esa dependencia también está coordinando un trabajo de investigación con los cuerpos de inteligencia para sancionar a los vendedores clandestinos de biopolímeros.
En las estéticas, estas sustancias son promocionadas con nombres que enmascaran la realidad, como
Biofil, Polifil, Polifil Metacrilato, Biosiluet, Metacol, PMMA o células expansivas, pese a que en realidad se trata de sustancias no biodegradables, derivadas del petróleo, que son objeto de uso industrial para rellenar cauchos, entre otras aplicaciones.
Consecuencias nefastas,
como la migración de la sustancia hacia otras partes del cuerpo, en forma de tumores o infecciones, por mencionar las más comunes, e incluso la muerte de muchas mujeres, hicieron que estas sustancias fueran prohibidas desde
hace más de 10 años en Estados Unidos y países de Europa.
Por su parte, Taylee Castellanos, vocera de la campaña a la que se han sumado 920 personas, agregó que la mayoría de las afectadas son mujeres, pero que también existen casos de hombres perjudicados.
“Nosotros no queremos que casos como estos se sigan repitiendo, por eso hemos tomado una actitud de prevención y esperamos la solución a nuestros problemas, asumiendo una actitud responsable dando a conocer a las demás personas los daños que puede ocasionar esta sustancia”, precisó la dama.
Castellanos recordó que el uso de estos productos está prohibido en el país y resaltó la importancia de realizar las denuncias para hacer efectivas las inspecciones, a través de los números 0212-408-05-38/408-05-40 o de la página web www.mpps.gob.ve.
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